Ácido Glicólico: lo necesitas y todavía no lo sabes

Crónicas de una boticaria de barrio

¿Tienes la piel opaca, irregularidades, asperezas, puntos negros, poros dilatados, espinillas y manchas?. Si observas algunos de estos signos en tu cutis necesitas en tu rutina cosmética diaria, el glicólico. Un aliado de origen natural que trabaja progresivamente para conseguir una piel sin imperfecciones.

Ácido glicólico
Ácido glicólico

Por Ariana F.Palomo*

*(farmacéutica, CEO en Lp10 Lab, investigadora predoctoral en comunicación e información contemporánea en la USC y presidenta de la asociación de científicas gallegas “La ciencia es Femenino/A ciencia e feminino”

¿Glico qué…?

El ácido glicólico es un alfahidroxiácido (AHA) que se usa para trabajar la superficie más profunda de la piel y también sirve para tratar las pequeñas arrugas, la falta de luminosidad o la piel dañada por el sol. 

De hecho, es uno de los favoritos de las coreanas, como explican en "El arte coreano del cuidado de la piel", el libro editado por Miin Cosmetics, en el que colocan al ácido glicólico como uno de los más usados para realizar exfoliaciones químicas con las que eliminar las células muertas. Desde luego es fundamental e indispensable en la rutina nocturna para pieles grasas o con problemas de acné.

Este AHA de lp10, obtenido de la caña de azúcar , está muy presente en las buenas rutinas cosméticas desde hace dos décadas porque ayuda como ninguno a revelar una piel nueva, a estimular la regeneración celular, a luchar contra la piel grasa, regular los cutis mixtos, evitar los puntos negros o afinar los poros. 

En cosmética se utiliza en concentraciones que varían entre el 4% y el 20%, con beneficios diversos según los parámetros. El glicólico lp10 es un  gel muy equilibrado con una concentración del 15% que está compensado con láctico para que la piel deje atrás las impurezas, adquiera luminosidad y los poros se reduzcan hasta hacerse invisibles.

¿Cómo se usa?

Si solo se usa una vez a la semana se consiguen exfoliaciones muy ligeras sobre la piel, es antiinflamatorio, antioxidante, hidratante y bactericida. Si se usa todas las noches se consigue despigmentación, disminución de arrugas y se puede indicar para tratar el acné.

No se aconseja combinarlo con otros ingredientes que resulten agresivos ni con otros ácidos, especialmente si se tiene la piel sensible. Tampoco recomendamos usarlo más de seis meses seguidos, recomendamos periodos de descanso, porque usado de manera prolongada puede resecar en exceso la piel. Tampoco es adecuado ara el contorno de los ojos porque es una piel más fina que el resto del rostro.

 Al usarlo por primera vez puede sentirse una ligera sensación de picor o cosquilleo, eso es que el gel está actuando, está acelerando la regeneración de la piel y cerrando los poros. Hace una excelente pareja con la vitamina C que ayudará a mejorar la firmeza y suavizar las marcas de acné.