Soluciones para la fascitis plantar; cuando no podemos dar ni un paso más

Crónicas de una boticaria de barrio

Fascitis plantar. Imagen de Isabel F. Palomo
Fascitis plantar. Imagen de Isabel F. Palomo

La fascitis plantar es una inflamación del tejido conectivo de la planta del pie. La fascia es una especie de “bolsa” blanca que recubre la musculatura del pie y va desde el talón de aquiles hasta los dedos.

Cuando esa especie de “tela” se inflama produce un fuerte dolor que hace muy difícil caminar. La tensión de la fascia plantar, en la mayoría de los casos, se produce por una alteración mecánica que está relacionada con nuestra forma de apoyar el pie, es decir, es una inflamación producida por una mala pisada que se agrava al andar o al correr. El tratamiento quirúrgico no suele dar buenos resultados y lo mas habitual es que quienes la padecen terminen consumiendo muchos AINES (antiinflamatorios, analgésicos) tópicos y/o orales y que, tras un estudio biomecánico, un ortésico les confeccionadas unas plantillas ortopédicas que disminuyan la tensión de este tejido.

El frío local produce un alivio momentáneo, como en todos los procesos inflamatorios por lesión, pero no suele ser suficiente. Las visitas al fisioterapeuta, al podólogo o ponerse infiltraciones son recursos habituales en las personas que la sufren.

Si lo has probado todo y no funciona.

Muchas veces no se tiene en cuenta que la fascia es una fibra de colágeno que se puede debilitar por falta de micronutrientes fundamentales como la vitamina C o el magnesio y que también se puede alterar e inflamar por intoxicación de los tejidos, con sustancias como los microcristales de ácido úrico, oxálico o metabolitos procedentes de una mala alimentación o derivados de problemas renales o circulatorios.

También hay dolores similares a la fascitis plantar y que no lo son. Puede existir un pinzamiento del nervio tibial que se comprime en el túnel del tarso.

¿Cómo me debo calzar si tengo fascitis plantar?

Tenemos que eliminar los tacones de nuestro zapatero. Las suelas de nuestro calzado deben ser finas, es decir, lo mas parecido a andar descalzo, la horma ancha, y en general es preferible un zapato ligero y transpirable.

La solución tópica sin efectos secundarios

Proponemos una inmersión de los pies con nuestras sales antiinflamatorias y desintoxicantes Lp10. Cuatro cucharadas de este nutracéutico de nuestro laboratorio en cinco o seis litros de agua tibia o calentita durante 15 minutos.

Para terminar, un automasaje con unas gotas de nuestro aceite de magnesio combinado con aceite antiinflamatorio y calmante.

Tratamientos en cabina

Un tratamiento de la fascia plantar en cabina consta de lo siguiente:

  1. Inmersión en las sales desintoxicantes durante 15 minutos, mientras los compuestos activos actúan, nuestra titulada en estética y masaje relajará la mandíbula, la zona de la pelvis y las rodillas, ya que estas zonas también sufren los efectos de una mala pisada.
  2. Masaje plantar antiinflamatorio con aceite de magnesio y aceite antinflamatorio Lp10.
  3. Tratamiento circulatorio drenante
  4. Crioterapia plantar, se finaliza con un masaje con gel frío.

Recomendamos cuatro sesiones como mínimo y complementar el tratamiento con nuestro nutracéutico de magnesio y vitamina C todas las mañanas antes de desayunar para activar la síntesis de colágeno, principal componente de la fascia plantar.