Poesía

Triste realidad

Las calles están vacías, 
no hay ruido que silenciar 
porque reina la armonía. 
Hay una paz celestial 
que no parece real, 
sino pura fantasía. 
Triste realidad
Os Mallos vacío 08
Os Mallos vacío

Las calles están vacías, 
no hay ruido que silenciar 
porque reina la armonía. 
Hay una paz celestial 
que no parece real, 
sino pura fantasía. 

Oigo pájaros cantando
y veo las nubes muy negras. 
Pero no veo niños jugando, 
aunque despierta la primavera. 
Algunos hombres anhelan
que venga pronto el verano, 

volver a romper la calma
ensuciando el ambiente, 
contaminando sus almas
como hace un lelo imprudente, 
mas inseguros seguramente,
o más locos que una cabra. 

La aptitud de los sanitarios, 
a la altura que se espera. 
Ganando un pequeño salario, 
se juegan la cabellera, 
y luchan desde sus trincheras 
con los EPIS muy precarios. 

Si el mundo de la cultura 
pone su grano de arena,
otros, van sembrando dudas.
Son patriotas de verbena
que vejan de forma obscena
a las clases inseguras. 

Rescatamos a los bancos, 
exportamos el talento. 
Rescatamos de un barranco
fachas para el parlamento,
caciques que en malos momentos
saltan primero del barco. 

Para nada sirven las banderas
cuando hay penurias,
para nada las fronteras, 
ni tampoco las tertulias 
que toleran las injurias
de charlatanes o verduleras. 

¿Qué esperanza puede quedar, 
si tropezamos con una piedra
y volvemos una y mil veces a tropezar? . 
Agotamos los recursos de la Tierra
y ganamos dinero con las guerras. 
Esa es nuestra triste realidad.

Triste realidad