María encontró a la empresa Repara Home Express S.L. por internet, tras realizar la búsqueda: “cerrajero de urgencia A Coruña”. La empresa fue el primer resultado. Llamó y, sin informar del presupuesto, un técnico llegó a su local en unos 15 minutos. Relata que el cerrajero se puso a trabajar sin darle precios y señalando que no se preocupase porque el seguro se haría cargo. “cambió el bombín de la cerradura y me dio a firmar en una tablet o semejante el coste de los mismos: 1.584,98 euros, tuve que firmar dos veces, al ver que me parecía abusivo, me dijo que él lo entendia pero que era un mero empleado que ganaba 1.100 euros. Tuve que pagar con tarjeta porque no tuve más opciones y al pedirle explicaciones me dirigió al número al que había llamado para que lo enviaran a él”, cuenta María.

El precio no sólo le resultó abusivo a María. Fuentes profesionales del sector nos aseguran que el precio está muy por encima del común del mercado que, incluso siendo de madrugada y urgente, rondaría los 200 o 300 euros. El precio que le cobraron a María es 6 veces el que recomiendan otros profesionales.

El caso resulta llamativo, pero no es aislado. La empresa Repara Home Express S.L., radicada en Valencia, tiene múltiples reclamaciones en la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios). En todas ellas los afectados y afectadas relatan que no recibieron información telefónica del precio. Las reclamaciones también coinciden en señalar “precios abusivos” que, en la mayoría de casos, no fueron pactados pues se detallaron después de realizar el trabajo.

Ya el 27 de diciembre de 2022, una mujer reclamaba en OCU una situación similar. Había salido a tirar la basura y se había dejado las llaves dentro. Realizó una búsqueda parecida a la de María, pero en otra ciudad y contactó con el primer resultado. Afirma que insistió en varias ocasiones en conocer un presupuesto antes de que el técnico se desplazase, llegando a mandar una foto de su cerradura. “Insistí en saber de un presupuesto durante mi llamada de watssApp, pero la empresa se negó a darme uno” escribió. El cerrajero, tal y como relata, abrió la puerta con una tarjeta plástica y le cobró 713,19 euros. En esta ocasión también insistió el técnico en que el seguro se haría cargo. Un ejemplo parecido a la reclamación registrada el 27 de marzo de 2023, donde llegaron a cobrar por una apertura de puerta un precio de 1.274,90 euros. El afectado cuenta que su seguro le indicó que se trataba de un precio abusivo y que solo le cubrirían 120€ correspondientes al precio del mercado por ese servicio.

El 1 de septiembre del 2023 encontramos otra reclamación parecida. El afectado señala que tampoco recibió información de los precios hasta que se realizó el trabajo: una apertura de puerta con llave dentro. La factura ascendía a 984 euros. Añade que el profesional le dijo en reiteradas ocasiones que el seguro se haría cargo.

Más grave resulta la reclamación interpuesta el 30 de marzo del pasado año. El usuario relata que no le facilitaron presupuestos hasta estar en el lugar. La reparación consistió en apertura de la puerta y cambio de la cerradura. Según sus palabras, le señalaron que el trabajo completo serían 700€ más I.V.A. Sin embargo, solo realizaron la apertura, emplazando al día siguiente el cambio de cerradura que nunca se llegó a realizar. Cuenta que se le había dicho que no se le cobrarían gastos de desplazamiento, aunque estos también aparecen en la factura. Un presunto trabajo incompleto aunque cobrado a precios muy superiores a la media habitual. Constan en la factura”, escribe el afectado.

En situaciones de emergencia: cuando nos han robado, hemos perdido las llaves, nos hemos quedado encerrados o encerradas… somos vulnerables. No pensamos con claridad y tomamos decisiones marcadas por la urgencia. Por eso, ante estos casos, hay que asegurar algunas cosas. En primer lugar, es recomendable acudir a una empresa con sede en la ciudad, mejor si es alguien de tu propio barrio para tener más seguridad y poder reclamar en caso de problemas. El presupuesto tienen que ofrecértelo siempre antes de realizar el trabajo, por teléfono deberían poder aproximarlo, pero en ningún caso debes firmar un presupuesto después de que se lleve a cabo la reparación. Cuando firmas un presupuesto significa que has aprobado ese pago previamente a la realización del trabajo y que, por lo tanto, eras conocedor del precio y estabas de acuerdo con él. El presupuesto es anterior a la actividad, como su propio nombre indica. Hay páginas web que te permiten comparar precios de casi cualquier reparación o desperfecto a solucionar. Compruébalo antes de aceptar un presupuesto. Ten en cuenta que los seguros no se harán cargo de los precios inflados o abusivos, cubrirán las tarifas habituales según el precio estimado del mercado.