Este reportaje narra su viaje desde Turquía hasta España, una travesía llena de desafíos y logros, marcada por la valentía y la perseverancia.

La llegada a España

Omer llegó a España en 2005, en busca de un refugio seguro lejos de los conflictos políticos de Turquía. “Decidí salir por la situación política del país”, explica Omer, de origen kurdo. Su viaje fue largo y lleno de obstáculos, llegando sin documentación, sin conocer el idioma y sin ningún contacto en España. A los 22 años, se enfrentó a la incertidumbre y a las dificultades de ser un refugiado en un país nuevo.

Primeros pasos en Madrid

Omer fue acogido por la pequeña comunidad kurda en Madrid, que le proporcionó un lugar donde dormir y el apoyo necesario para comenzar a reconstruir su vida. “En un piso de dos habitaciones éramos nueve personas durmiendo”, recuerda Omer con gratitud. Poco a poco, Omer empezó a trabajar en la hostelería, aprovechando la experiencia previa que tenía en Estambul.

Arraigo y estabilidad

En 2009, Omer consiguió la residencia en España a través del arraigo social, lo que le permitió asentarse y planificar un futuro más estable. En 2011, se mudó a A Coruña, donde continuó trabajando en la hostelería. Fue aquí donde Omer decidió abrir su primer negocio, un kebab en la calle Gaiteira, en 2013. Este fue un paso crucial que marcó el comienzo de una nueva etapa en su vida.

El encuentro con Ainur

En 2016, Omer conoció a Ainur, también de origen kurdo, a través de un primo suyo. A pesar de las distancias y de conocerse inicialmente por teléfono, ambos sintieron una conexión profunda. Ainur, que vivía en Turquía, decidió confiar en Omer y seguirlo a España tras su matrimonio en Turquía en 2017. En 2018, Ainur se mudó a A Coruña, donde empezó a adaptarse a una nueva vida lejos de su familia y su cultura.

Creación de cafetería Mezo

Ainur, con su talento innato para la repostería, comenzó a elaborar postres y bollería en casa, lo que inspiró a la pareja a abrir una cafetería. En diciembre de 2023, después de meses de reformas y preparativos, inauguraron la Cafetería Mezo. Aquí, combinan lo mejor de la repostería española y kurda, ofreciendo desde tartas de queso y tiramisú hasta delicias de repostería turca que podemos degustar en su local.

Un negocio familiar

El éxito de Mezo no sería posible sin la colaboración estrecha entre Ainur y Omer. Mientras Ainur se encarga de la repostería, Omer gestiona el negocio, asegurándose de que cada cliente reciba el mejor servicio. Además, cuentan con la ayuda del hermano de Ainur, quien también trabaja en el negocio familiar.

Desayunos kurdo-turcos

Una de las especialidades de Mezo son los desayunos kurdos, conocidos por su abundancia y variedad. “Desayunamos muy fuerte”, comenta Omer. Estos desayunos incluyen varios tipos de queso, aceitunas, miel, mermeladas, y platos como menemen (una mezcla de huevos, pimientos y tomates). Además, ofrecen infusiones de sabores como granada y kiwi… para saber más hay que ir a conocerles a Mezo

La historia de Ainur y Omer es un testimonio de valentía y tesón. Desde su difícil comienzo como refugiado a la apertura de dos negocios de hostelería en pleno funcionamiento. Su viaje es una inspiración para muchos. Mezo no es solo un lugar para disfrutar de deliciosos postres y desayunos, tés, cafés... sino también un símbolo de la rica diversidad cultural y de las historias humanas que unen continentes y culturas.