Nadie niega que tenemos unos problemas muy serios

Dicho esto, los que como yo, llevamos trabajando en el barrio unos sesenta años (que ya, creo, quedamos pocos en activo), recordamos muy bien la historia reciente de nuestro queridísimo MALLOS

Nos hemos sobrepuesto siempre a los problemas con serenidad, con seriedad, con una empatía entre todos que nos ha funcionado y hemos superado momentos muy complicados.

Creamos colegios cuando el Estado no los tenía, creamos aparcamientos con nuestra unión y soterramos 500 coches, conseguimos un estupendo comercio y tenemos un acogedor barrio.

Esta pandemia nos ha roto los esquemas, el palo ha sido terrible, y sin duda nos ha influido, y mucho, en nuestro ánimo.

El panorama nos ha cambiado, nuestro sistema de soportar y encajar desgracias o asuntos de-sagradables, está saturado. ¡BASTA YA! . Es lo que se escucha en el barrio.

Las asociaciones de vecinos y comerciantes, aunque la voz que se escucha es: “no hacen nada”, estamos tan preocupados como vosotros, pues también somos “vosotros”. Hemos hablado con un grupo de responsables de las concejalías de: Medio ambiente, Urbanismo, Seguridad ciudadana, una larga reunión donde se han expuesto con toda crudeza los problemas: bus desaparecido, ocupación de locales, inseguridad en las calles, plaza Padre Rubinos, limpieza, luz.

Ellos son los que tienen que estar “ocupados” en solucionar los problemas.

A las autoridades son a las que tenemos que presionar, con denuncias y más denuncias.

La ciudadanía ya los sufre, ya los ve, y no podemos asustar a nuestros clientes a nuestros vecinos y decir a los delincuentes que este es un barrio donde tienen compañeros que viven estupendamente. 

Con todo respeto a todos mis vecinos, con toda la sinceridad de una larga experiencia de bisabuelo os digo bajito y al oído: no quiero un barrio donde nos defendamos violentamente, donde olvidemos nuestras virtudes y pongamos el foco solo en nuestras desgracias, los problemas que estamos sufriendo son los problemas de todas las ciudades, ¿entonces nos resignamos? no, eso nunca, denunciemos los problemas de nuestras ciudades, como problemas generales denunciemos la causa de ellos: leyes que permiten la ocupación, ausencia de policía, drogas, etc.

Pero no pongamos a nuestro barrio como ejemplo de barrio marginado, porque no es verdad.