A los jóvenes les recomienda que se hagan responsables de su vida y que sean ese cambio que quieren ver. También reconoce que estamos fallando como sociedad cuando seguimos sin enfrentarnos con valentía al acoso escolar. Liza es una investigadora tenaz que enseña a los profesores a convertir sus aulas en un lugar de transformación. Probablemente la misión más importante que tenemos.

Cuéntate en pocas palabras

“Tengo 57 años y considero que aún no he llegado a dónde quiero y merezco estar. Por circunstancias vitales muy duras, mi vida se ralentizó; pero no me arrepiento de nada de lo hecho y  considero que es el momento de recuperar lo perdido, porque cuento con lo más importante, el amor y empuje de mis dos hijas. No tengo miedo a nada ni a nadie, soy consciente de qué estamos aquí de paso y no ansío nada material, al contrario, desprenderme de todo me hace más libre, y en ello estoy”.

1.-¿Cómo definirías tu trabajo, tu ocupación actual?

Mi tabla de salvación, en su momento, y la profesión más bonita del mundo: formar a los que forman. Me hace sentir realizada y, por tanto, ser feliz en mi día a día.

2.-¿Qué te hace única?

Mi capacidad de superación y mi gran sentido de la responsabilidad.

3.-¿En qué ocuparías tu tiempo, si no necesitases trabajar para mantenerte?

Pienso que, en lo mismo, además de dedicar más tiempo a mis hobbies, como la lectura, el deporte, el paseo y visitar más a mis amigos/as. Me gusta darme a los demás y seguro que me iría a hacer algún voluntariado, algo que tengo en la agenda, entre las cosas pendientes.

4.-¿Cuándo y por qué razón te han dado las gracias últimamente?

Un amigo me dijo: “gracias, gracias, gracias” y yo pregunté por qué. Su respuesta me sorprendió: "porque gracias a tu empuje y vitalidad me has devuelto a la vida que había perdido con el encierro de la pandemia".

5.-¿Cómo titularías la película de tu vida?

“Renovarse o morir”

6.-¿Te quedan sueños por cumplir?

Muchossssss

7.-¿Qué cosas temes?

A nada de nada.

8.-¿Una meta alcanzada y otra por conseguir?

Una meta alcanzada es ser madre y “profe de mayores”, como decía de niña. Una meta por cumplir es salir de este mal llamado primer mundo y conocer al verdadero primer mundo que está en donde no tienen nada y son felices.

9.- Nunca te acuestas sin... 

Dar gracias por lo afortunada que soy.