¿Cuál es el papel del comercio de barrio?

Mis queridos vecinos,” hoy el mundo adelanta que es una barbaridad”. Algo así decía una canción de mis lejanos años mozos... sí, de verdad, ya entonces veíamos unos adelantos terribles: en algunos sitios ya había tele, en muchas aldeas tenían luz, los coches corrían a 50 por hora, ya se podía viajar en avión, etc. ¡Y qué orgullosos estábamos!

Pero el salto que hemos dado en los últimos años es de vértigo: móviles, plasma, aviación super-sónica, coches sin conductor, y GRANDES SUPERFICIES COMERCIALES.

comercio
comercio y nuevas tecnologías

¿Somos más felices?, ¿nos queremos más los amigos y familiares? ¿nos sentimos más humanos? ¿Los grandes adelantos hacen que seamos más iguales, más solidarios? ¿hay menos pobreza? ¿Estamos más satisfechos?

No estoy diciendo, ni asegurando nada, sólo les pido que se contesten con sinceridad. Yo me centraré en lo nuestro: Las grandes superficies comerciales.

Como todos los demás adelantos, yo pienso que este gran invento, no es malo, ciertamente, es un adelanto, si lo dosificamos adecuadamente, si nos “empachamos” con él, estaremos matando el comercio de toda la vida, el comercio de mi vecino, de mi amigo, nuestro dinero se marchará a enriquecer a otros países, nuestro barrio se quedará sin escaparates, sin el amigo al que puedes acudir en un apuro, porque te quedaste sin pan, o necesitas con urgencia unos tornillos. El barrio será solamente donde tengo un piso para dormir.

El comercio siempre fue mucho más que comprar y vender. Los comerciantes difundieron culturas, crearon ciudades, aunaron pueblos, fueron imprescindibles en los años de pobreza (los de mi edad y en nuestro barrio, sé que los aún más jóvenes, recordamos las libretas manoseadas donde se apuntaban los “pufos” que se pagaban poco a poco.
¿Queremos matar ese comercio que da miles de puestos de trabajo? En la FUCC (federación unión comercio coruñes) estamos unidos asociaciones de casi 20 zonas coruñesas luchando por defender muchos cientos de comercios, no contra nadie, sino a favor de lo nuestro, para que nuestro dinero, se quede entre nosotros, que es la forma de repartir riqueza, no de almacenarla solamente del lado de los riquísimos.