Anami es mucho más que una tienda de ropa. Es ese lugar que siempre viene bien tener cerca, donde puedes encontrar desde un vestido para una ocasión especial hasta esa blusa o chaqueta que te hace falta para el día a día. Aquí las clientas encuentran prendas con estilo, tejidos agradables y calidad, pero sobre todo, una selección pensada con mucho cariño.

Lo que más valoran quienes ya han pasado por allí es que hay ropa para mujeres de todas las edades, desde los 20 en adelante, y que siempre se encuentra algo diferente. Anami combina colecciones que llegan de Italia, Turquía, India, Bangladesh y China, todas seleccionadas buscando una buena relación calidad-precio, sin renunciar a que las prendas se sientan cómodas y duren.

Aquí no se trata solo de cuánto cuesta, sino de lo que te llevas. Hay opciones para todos los gustos, y lo que importa es que cada prenda tiene algo especial. No es cuestión de comprar por comprar, sino de encontrar eso que realmente te encaja y que vas a disfrutar durante mucho tiempo. Los bolsos de piel que traen desde Italia o las pasminas de la India aportan ese algo más que completa cualquier look y que siempre apetece llevar. 

Desde el primer día, las vecinas no han parado de agradecer que una tienda así haya abierto en el barrio. Muchas dicen que ya no necesitan desplazarse al centro para encontrar ropa bonita, y que Anami les ha solucionado más de una compra de última hora. La tienda tiene alma, y eso se nota en cada detalle.

Y si la tienda es especial, su historia también lo es. Detrás está Sumaiya, una chica joven que llegó al barrio con su familia cuando era solo una niña. Mientras sigue estudiando para técnico de rayos, ha dado el paso de abrir su propio negocio, con la ayuda de su padre, quien siempre ha llevado los negocios en la sangre. Fue su padre quien le regaló, por su cumpleaños, la oportunidad de levantar Anami, un sueño que nació de la ilusión y la necesidad de ofrecer algo diferente en la zona.

El nombre de Anami no es casual: es un homenaje a su bisabuelo, Anamia una persona muy conocida y querida en su pueblo por su esfuerzo y visión para los negocios. Llevar su nombre en la tienda es, para Sumaiya, una forma de seguir ese camino.

Anami es una tienda alegre, cercana y con mucho estilo. Si todavía no la conoces, date una vuelta por la Avenida de Arteixo 85 y déjate sorprender. Seguro que no sales con las manos vacías.